El llamado “Estallido Social” ocurrido en Chile en la primavera del 2019 no solo puso en tela de juicio el sistema económico de corte neoliberal imperante en el país por décadas, sino que, desde su inicio y con el pasar de los días y semanas, todo empezó a desmoronarse como un castillo de naipes. En este contexto, todas las instituciones del estado tuvieron que pasar por el tamiz de un pueblo enojado. Una de las consecuencias finales del estallido fue la desacralización de hombres hasta entonces considerados héroes y otra fue la aparición de un aire refundacional que quedó suspendido en el ambiente cuando llegó la pandemia del Coronavirus, esta encerró a la gente en sus casas y puso freno y paños fríos a la revuelta.
El Dekamerón, sin ánimo ni recursos para competir con el Decamerón de Bocaccio, es un libro de relatos que, en su mayoría, tienen relación con algunas de las causas que supuestamente llevaron al “Estallido Social”. Al igual que el libro de Bocaccio, el Dekamerón fue escrito bajo la sombra de una pandemia y en la frontera de un cambio. Cambio que, al menos en la Europa de Bocaccio, permitió el paso desde el oscurantismo medieval al Renacimiento.